Ayer estuve durmiendo en el turismo así que no tenía internet para actualizar el blog. Estábamos despidiendo al bueno de Claro, pero eso ya lo contaré mañana que es cuando se va. Hoy quería hablar de la noche del lunes.
Como puse en mi último post, estaba escribiendo precisamente este blog cuando empecé a sentir el temblor. Al principio pensé que había sido un rayo que había caído muy cerca (aquí las tormentas son muy fuertes y alguna vez los rayos caen bien cerquita y los puedes sentir) pero en seguida me di cuenta que era un terremoto porque era demasiado movimiento. Me puse de pie, flipando, el suelo se movía mucho y toda la casa vibraba. Estaba bastante tranquilo y me acerqué a la puerta. Me quedé pensando si lo mejor era quedarme dentro o salir fuera, miré al tejado y vi que no había nada que pudiera caerme encima. Mientras pensaba el temblor paró. Duró algo menos de 30 segundos.
Me llegó algún mensaje de algún vecino para asegurarse que estaba bien. Salí a comprobar que todo estaba en orden, que no había nadie pidiendo ayuda y que el cuadro del pueblo era exactamente igual que antes del temblor. Ya me habían avisado que aquí los temblores normalmente apenas se notan, pues el suelo es muy robusto y las casas aguantan perfectamente. Menos mal. Una vez comprobé que no había pasado nada la verdad es que me hizo ilusión haber vivido mi primer seísmo.
Aún hoy lo seguimos comentando. Hay quien dice que lo mejor es salir fuera, pero siempre que no haya nada alrededor, pues una de las personas que murió fue precisamente por estar en la calle y caérsele un poste encima. Claro me dijo que lo mejor es quedarse en el marco de la puerta y eso sí que creo que lo he oído más veces. Así que ya lo tengo aprendido para la siguiente. Lo que sí que todo el mundo está de acuerdo es que hay que abrir las puertas en cuanto uno empieza a sentirlo, pues luego pueden deformarse las paredes y quedar la puerta atrancada. De todos modos, aunque te quedes atascado en casa las pupusas caben por la ventana (otra ventaja).
Para terminar un dato curioso. Aquí recuerdan perfectamente el último terremoto grave que hubo. Fue en el 2001, el 13 de enero. Después hubo otro el 13 de febrero del mismo año. Al parecer en uno el suelo se agitaba de derecha a izquierda y en otro de arriba a abajo. Pues bien, el lunes, fue exacatamente el día 13 también, de octubre. Y además, entre el 2001 y el 2014 han pasado 13 años. En aquella ocasión fue de menos intensidad, de 6 con algo; esta vez ha sido de 7,4. Pero el epicentro ha sido en el mar, no como aquella vez, por lo que los daños han sido mucho menores.
Salud.
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