Este departamento está a punto de celebrar una consulta popular el próximo domingo 21 de septiembre para prohibir por ley la explotación minera en sus tierras. Va a ser un proceso pionero en El Salvador y hay cierto peso mediático.
Hemos salido a las 6:30 A.M. para intentar subir con algo de fresco. Ya dedicaré una entrada al clima de aquí, pero resumiendo: hace mucho calor (y eso que ahora estamos en invierno). Se tarda más o menos una dos horas en subir. Hay subidas y bajadas, barros, cacas, piedras, animales, vallas, ríos que atravesar y unas pendientes del copón. Eso sí, el entorno es una maravilla, con árboles y plantas que no existen en Europa.
En la última foto, las casa que se ven es el pueblo donde vivo. Como podéis ver la zona no deja indiferente y sería una pena quedarnos sin estas montañas. Además, podéis documentaros en internet de la cantidad de efectos negativos que tiene dicha industria. Además que no mejora la calidad de vida de la gente del municipio sino que la empeora, pues no es sostenible, y cuando se van al final son más pobres, se quedan sin paisaje, con peores aguas, con peor salud, etc. Fuente.
Una vez llegamos arriba estuvimos riéndonos viendo a la gente subir tan reventada. Fue bastante dura, pero pude subir, y sólo pisé dos cacas. Iba en manga larga para intentar que los mosquitos dejen de devorarme. Aquí os dejo mis pintas y una foto panorámica con las vistas
De nuevo fue increíble las historias que contaba la gente. Recordaban cuando subieron a la virgen, que es una escultura de piedra muy pesada; fue todo el pueblo y la llevaban subida a una lona manejada con dos palos. 12 personas iban en total cargando con ella y entre todos iban haciendo relevos mientras las mujeres y niños cargaban con piedras y material para hacer cemento para hacer el altar. Luego empezaron a contar historias de otra matanza que hubo en la ladera próxima a ese cerro. Una mujer nos contaba como murió su padre. Había un grupo grande de gente por los montes y los militares les habían acorralado y disparaban contra ellos. Varios, como ella, consiguieron escapar, pero su padre se había quedado escondido. Otro hombre anciano, que también estaba escondido lo vio todo. Dos soldados cogieron a una mujer joven y la violaron, al rato llegó otro soldado y le dijeron que se aprovechara también, y también la violó. Como sólo estaba ese militar en ese momento, su padre (de la señora que nos contaba la historia) se avalanzó sobre él con toda la rabia. Le golpeó y consiguió hacerse con su fusil, pero no sabía manejarlo. Así que el soldado pudo gritar, pedir ayuda y vinieron más. Entonces le ataron, le echaron ladera abajo y después le degollaron. Como comentaba en el post anterior, son historias desgarradoras que oyéndolas de viva voz hacen que se te pare el corazón. Lo más llamativo es que no se percibe el odio en su relato. Lo cuenta sonriendo, con voz dulce, orgullosa de su papá.
Primero habló Don Felipe, el alcalde. Contó que cuando vinieron de la empresa minera empezaron a hacer mediciones y dejar placas, pero que todo el pueblo hizo una batida y se las llevaron todas. Que cuando llegó el empresario a negociar por los terrenos casi sale todo el pueblo con cuchillos, el tío pasó mucho miedo y dijo que llevaba 12 años trabajando en el sector de la minería en El Salvador, que nunca se le habían enfrentado tanto, a lo que Don Felipe contestó que la diferencia es que ahora estaba frente a un pueblo unido.
Después se celebró la misa y en la homilia los chicos hicieron una obra de teatro que habían preparado ellos sólos en el colegio hablando de todas las consecuencias negativas que tenía la extracción de minerales y del oro concretamente.
La vuelta fue mucho menos dura, y alegría enorme al ver que en el comedor había espaguetis con carne. Mañana lunes 15 de septiembre es la fiesta nacional. Así que habrá más que contar.
Salud.
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